_


En una de las primeras y grandes sorpresas de este mundial, la selección de los Suizos venció a "La Madre Patria" por la vía del contragolpe 1 gol por 0 en el estadio de Durban.

A nadie sorprendió el desarrollo de las acciones durante la primera parte: de un lado, España en el control del balón, terreno y el ritmo de juego; del otro, Suiza abroquelada en su campo buscando cómo cortar la circulación rival para salir rápido de contra.

Para quebrar el cerrojo suizo, Vicente del Bosque apeló a la movilidad de sus jugadores de ataque y la llegada por sorpresa tanto de los laterales como de los volantes exteriores. De hecho, las dos primeras situaciones de gol las produjeron Ramos, con escalda por la derecha que terminó con un remate desviado contra el primer palo al 17, y al minuto 24 una aparición de Piqué como centrodelantero, quien perdió en el mano a mano con el arquero Diego Benaglio.


Tan un solo un tiro libre de Reto Ziegler, que Iker Casillas controló en dos tiempos, “inquietó” a España, que volvió a merodear el gol sobre el final de la etapa por intermedio de David Villa, aunque su balón picado se perdió contra el poste izquierdo.

Si algo necesitaba Suiza para acentuar su plan de juego era un gol a favor, y este llegó bien temprano en el complemento, al minuto 52 con algo de fortuna: tras un rechazo desde el fondo, Eren Derdiyok recibió por el medio y encaró a Casillas, quien alcanzó a pellizcarle el balón con los pies; sin embargo, luego de pegar en Piqué, el mismo le quedó servido a Gelson Fernandes, quien lo empujó al fondo del arco.

España acentuó su presión y Suiza, su decisión a jugar al contragolpe. Del Bosque buscó más profundidad con los ingresos de Fernando Torres y Jesús Navas, y cuatro veces arañó la igualdad entre los minutos 63 y 72, pero la falta de puntería, el travesaño y Benaglio le negaron el gol.


Los helvéticos casi anotan el segundo a los 74, aunque el remate de Derdiyok, tras una jugada personal, fue devuelto por el poste izquierdo de Casillas. También estuvo a apunto de sentenciar el duelo dos veces Tranquilo Barnetta, más le faltó puntería.

Los compases finales, como era previsible, fueron propiedad exclusiva de España, que llenó de centros el área rival sin poder cabecear ninguno de ellos de manera franca. Suiza defendió con uñas y dientes su ventaja y llegó a 484 minutos sin recibir goles en un Mundial, la tercera mejor marca en la historia del torneo, abrochando así un triunfo crucial para sus aspiraciones futuras.

0 comentarios

Publicar un comentario

Tu Comentario Aqui:

_
_